Brasil y su opinión

 

La vida pública es bastante susceptible a cambios, tan solo un comentario distante a la opinión de la mayoría, sobre un tema sensible o radical; puede generar rechazo, discusiones y en el peor de los casos un enfrentamiento bélico. Es por esto, que, quienes están en el ámbito público, sobre todo los mandatarios, miden con pinzas cada una de sus palabras, para así controlar el efecto que están tengas y evitar o provocar a las masas, en función de sus intereses. Cada discurso o puesta en escena de un gobernante es televisada, repetida y comentada a lo largo del mundo, quien acceda a ella, desarrolla una postura sobre un tema o persona, en consecuencia, puede determinar su actuar o filiaciones a ideas o políticas. Es un “arma de doble filo”, que puede contribuir al progreso e intereses de un gobierno o significar su fin.

Esta herramienta es fundamental para el desarrollo de cualquier administración, buenas prácticas en comunicación implican apoyo ciudadano y extranjero, y contribuyen al progreso; en detrimento de malas prácticas, en las que el gobierno resulta un paria, distante a la población con poca favorabilidad y poca capacidad de acción. Por todo el globo se ven ejemplos de cómo esto anterior, impacta en el fin y/o perpetuidad de alguna corriente política, mandatario o ideales, y por tanto el cómo se gesta el mundo.

Tras este contexto anterior, en los últimos días ha sido noticia en todos los medios las declaraciones de Lula Da Silva, presidente de Brasil, relacionadas al conflicto vigente en Gaza. Dichas, han generado una serie de divisiones y afirmaciones en todo el mundo; hay quienes le apoyan, aunque en su mayoría ha evidenciado rechazo; incluso Lula ha sido catalogado como persona no grata en Israel. Este es un ejemplo evidente y actual del impacto de la comunicación, como amigo y verdugo para los lideres del mundo.

Brasil es hoy una nación relevante en la escena internacional, con una economía emergente, la séptima del mundo[1], en constante crecimiento, mayor a cualquier otro gobierno de la región en los últimos 20 años[2], todos quieren hacer negocios con el gigante de América del Sur; hace parte de Las BRICS, una alianza social, política y económica que está conformada por cinco naciones por sus siglas, Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Esta organización coopera económica y políticamente; ha tomado bastante relevancia en los últimos años, sus reuniones son mediatizadas y todos los gobiernos en crecimiento quieren hacer parte, tan notables son, que incluso pretenden establecer una moneda de cambio internacional equivalente al dólar para las transacciones con los miembros.

Este panorama hace que Brasil sea tenido en cuenta donde quiera que vaya. La semana pasada, durante la 37ª Cumbre de la Unión Africana, en Etiopia, para “La Educación inclusiva”, con 50 naciones participantes y desarrollada en entorno de muchas tensiones regionales; se contó con la participación de Mahmud Abás en representación de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), del presidente de Brasil Lula da Silva, además del presidente de la ONU, como muchos otros[3].

En este espacio, Lula tuvo la oportunidad de dar un discurso, en la apertura de la cumbre, donde aparte de dar la bienvenida a los asistentes y resaltar la importancia de asociación entre las naciones africanas y Brasil, pronuncio unas palabras sobre el conflicto con Palestina, dijo: "Lo que está ocurriendo en Gaza con el pueblo palestino no tiene precedentes en la historia. De hecho, ocurrió cuando Hitler decidió matar a los judíos"[4], calificando lo que esta sucediendo de un “genocidio”. Estas palabras desataron la polémica global, Israel acuso a al presidente brasileño de trivializar el holocausto y lo declaro persona no grata en su territorio, hasta que este se retractara.

 Estas palabras han provocado una división global, hay quienes apoyan la posición de Lula, como los países miembros de La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) que manifestaron respaldar las declaraciones de Lula, la asociación conformada por 10 naciones de Suramérica reconoce a Brasil como un defensor de los Derechos Humanos. Por otro lado, facciones del gobierno brasilero han convocado a una reunión con sus homólogos israelís para evitar un escalamiento de las tensiones, en desacuerdo con lo dicho en la cumbre; adicionalmente, Netanyahu a la cabeza de Israel asevera que Lula “ha cruzado una línea roja” con lo que ha dicho, en varios posts por la red social “X” ha evidenciado su descontento.

La ONU, que ha tenido varios roces con Israel sobre el conflicto, ha tratado de evitar hablar del tema y no darle “pie” al aumento de las tensiones y cierre diplomático israelí, pese a que buscan abiertamente un alto al fuego a toda costa desde el año pasado, además, del ingreso masivo de ayuda humanitaria. Al igual que la ONU, los países miembros de las BRICS, dada su cercanía y ubicación económica, política y social a Israel, sus aliados y enemigos han evitado hablar del tema, para así no impactar en el escenario global.

Es evidente que, pese a que referirse a conflictos es bastante polémico, hablar sobre la situación en Gaza es un gran tabo en el mundo de hoy. Dada la relevancia e historia del pueblo judío, pareciese que cualquier comentario definiera el curso de la guerra que el gobierno resguarda con recelo. Paralelamente, las acciones de Lula, que, si bien fueron un poco incendiarias y referirse a Holocausto Nazi revive un momento sensible de la humanidad, buscaban darle visibilidad a la situación que ocurre en Gaza; este mandatario, uso un espacio internacional como la cumbre para manifestar su punto de vista sobre este conflicto y apelar a un cese al fuego, generando presión internacional; logro su objetivo y ha dividido la escena internacional, movilizando al gobierno israelí y naciones por todo el globo.

 Se espera que el debate sobre este tema siga creciendo, así, la presión internacional para el cese el fuego se de la mano de más naciones, que con mayor frecuencia se pronunciaran acerca de lo que está ocurriendo en Gaza. Haciendo que lo que solía ser un tabo, sea hablado por todos, disminuyendo el poderío que ha tenido Israel y sus aliados, primando la salvaguarda de las vidas de ambos bandos, que hoy se pierden en esta región al lado del mediterráneo.

Esta situación vislumbra como las naciones logran organizarse para presionar cambios en el mundo. Gobiernos con poder afectan el desarrollo del panorama internacional, generan presión, división, acción y cooperación.  Estos, ocupan una posición privilegiada, que permite influir en el entorno en función de sus intereses y que no desaprovecharan, Brasil lo sabe y ha obligado a sus homólogos a discutir sobre un tópico complicado. Hace uso de sus herramientas comunicativas efectivamente, incluso si significa levantar desacuerdos.

Se seguirá la pista al desarrollo de estos hechos, esperando que la diplomacia logre salvar vidas y finalmente encontrar una solución a este conflicto tan destructivo, del que hoy tantas naciones hacen parte, mientras las naciones del mundo juegan al ajedrez geopolítico.

Comentarios

  1. Me parece que es un gran artículo, dada. La importancia que tiene Brasil en el ámbito mundial por su desarrollo sostenible, económico, político, y hasta deportivo. Los comentarios de Lula son propios de gobiernos progresistas que buscan protagonismo y publicidad en medios internacionales y que más escenario que el conflicto de Gaza, pues si vemos en el ámbito interno Brasil está sufriendo todo el acabose de los Progres. Me parece un excelente artículo

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  2. Gracias por compartir tus analisis, estamos de acuerdo con las reponsabilidades de estos actores politicos a la hora de dar dircursos, muchos priman la individualidad y cualquier comentario se puede prestar para escenarios donde la guerra sea la unica respuesta, debemos enfocarnos mas en escuchar atentamente y no tomar informacion a la ligera o a la ofensiva, ESCUCHAR: es un ejemplo que se aplica en la vida diaria.

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