La colonia española a hoy
Se aproxima la toma de posesión de
la nueva presidente de México, Claudia Sheinbaum, no obstante, este gran suceso
se ha visto un poco opacado por asuntos exteriores, ya que la nueva gran mandataria
decidió no invitar al rey Felipe VI de España al gran evento que marca el inicio
de su administración; esta decisión no se extiende a todo el gobierno español, el
presidente Pedro Sánchez Castejón, si recibió una invitación para asistir al
gran acontecimiento.
Tras esto, el martes 24 de septiembre,
la Cancillería española emitió un comunicado tildando de “inaceptable” esta negativa
y anuncio que no habrá ninguna participación del gobierno de España en el evento
en México
Dicha decisión de Sheinbaum
responde a hechos que sucedieron en 2019, cuando López Obrador, mandatario
saliente, en medio de la celebración de los 200 años de independencia mexicana,
envió al rey Felipe VI una carta, con la petición de que España expresara una disculpa
por los daños causados durante la conquista española. Texto que, hasta el día de
hoy, no ha sido respondido por el monarca.
La mandataria entrante, se
sustenta en buscar la continuidad de la intención del gobierno saliente, para
de cierta manera reivindicar con un acto representativo las injurias de la colonia
española y la grandeza de los antiguos pueblos de mesoamericanos,
Paralelamente, Sheinbaum puso a
su homólogo español en una encrucijada, ya que, al aceptar ir a la posesión, evidenciaría
tolerancia a “injurias diplomáticas”, así, Sánchez le daría la espalda a su monarca,
evidenciando dualidades y rupturas internas, dañando sus relaciones internas
con el rey; igualmente, y tras el anuncio de su no asistencia, respaldando a su
Estado, sin mencionar palabra, niega los agravios de la colonia española y se
distancia de Latinoamérica, además, tensiona las relaciones con México.
Tenciones, que son evidentes hoy,
y que se espera que continúen distanciando a ambos gobiernos, lo más seguro es
que ninguno seda; ya que, para aliviar asperezas, o bien; el rey español Felipe
VI debería aceptar los errores cometidos por la corona hace más de 200 años y
este podría ser el inicio de una ola de demandas por parte de las naciones latinoamericanas;
o; Sheinbaum se retracta de la carta
enviada por los mexicanos, lo que significa olvidar lo que paso y perder el
avance en reivindicación.
Ambos escenarios, son ahora poco
probables, y la relaciones entre estos países pasan por su peor momento. En
esta era actual, de reivindicaciones, es algo común ver a naciones que en algún
momento estuvieron bajo el mandato de otras colonizadoras buscar un acto de perdón,
que resulta en un camino para resarcir un daño pasado. Ojalá, todas los
implicados en estos sucesos se integren en estas dinámicas y apelen al mejor
contexto para todos.
Es evidente como sucesos
ocurridos hace mas de 200 años siguen vigentes hoy y resultan en un tema geopolítico
que determina el actuar de las naciones modernas, y como, un acto simbólico puede
significar el conflicto o la cercanía política.
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